El Apple Car podría haber cambiado la faz de la industria del automóvil

El Apple Car podría haber cambiado la faz de la industria del automóvil

Después de diez años de intensos esfuerzos e importantes inversiones, Apple ha puesto fin discretamente a su ambicioso proyecto de coche autónomo, también conocido como Apple Car, entre bastidores en su sede de Cupertino. Según detalles revelados por Mark Gurman de Bloomberg en su último boletín informativo sobre encendido, el concepto en el que estaba trabajando Apple prometía revolucionar el sector de la automoción.

El diseño estudiado por Apple hacia 2020 se inspiró estrechamente en el vehículo Canoo Lifestyle, una furgoneta con un diseño redondeado que no distingue entre la parte delantera y la trasera, dando la ilusión de un vehículo en perpetuo movimiento. Gurman señala que este modelo no tenía precedentes entre los vehículos producidos en masa, diseñado para una conducción totalmente autónoma de nivel 5.

Aunque el interior ha sido rediseñado varias veces, Apple había optado por una distribución minimalista, con asientos que recuerdan a los de una limusina o un jet privadocon capacidad para cuatro pasajeros.

Algunas versiones proporcionadas una gran televisión central para vídeos y llamadas FaceTimemientras que Pantallas del tamaño de un iPad suspendidas del techo brindaron a los pasajeros acceso a varios controles. Un innovador sistema de aire acondicionado redistribuyó el aire a lo largo de las paredes interiores, evitando dirigirlo directamente hacia las caras.

Apple había considerado previamente otros dos diseños para su vehículo: el primero recordaba al microbús Volkswagen de los años 50, apodado internamente “Bread Loaf”, y el segundo se acercaba más al prototipo Volkswagen ID Buzz de 2017. El cuarto modelo, inspirado en el Canoo Lifestyle Vehicle, había despertado el entusiasmo del director ejecutivo Tim Cook y del director de operaciones Jeff Williams.

Un proyecto difunto

Sin embargo, la última versión del proyecto incluía un nivel de autonomía 2, menos ambicioso, que requería la adición de volante y pedales. Las puertas correderas habían sido sustituidas por puertas que se abrían con bisagras. Al final, todas estas consideraciones quedaron obsoletas.

Aunque Apple podría haber transformado el sector del automóvil como lo hizo con el teléfono inteligente, la compañía prefirió centrarse en sus áreas de predilección, ya que el proyecto aún requiere muchos años de desarrollo y gastos importantes antes de llegar a la etapa de comercialización.